Estaba reviendo un poco los objetivos que me había propuesto este año ahora que falta poquito más de 60 días para terminarlo y empecé a hacer una especie de porcentaje de lo que había hecho, lo que me falta, lo que estoy haciendo y lo que todavía puedo hacer. Y lo que más me llamó la atención era que de lo que más quería hacer, fue lo menos que hice. Eso porque esas cosas son las que más esfuerzo me llevan y a las que más les encuentro excusas para no hacerlas. Este año quise pensar en tres frases que mencioné en el episodio “3 maneras de minimalizar proyectos”: recordar que tengo un tiempo limitado y no me puedo llenar de cosas, que el cómo paso mi tiempo es cómo paso mi vida y que no me tengo que distraer con un montón de proyectos. Debo decir que fui mejor que en otros años pero sigo muchas veces poniéndome excusas para no hacer lo que me propongo. Y acá comparto tres excusas que charlé con una amiga y que nos ponemos siempre para no hacer las cosas. Y cómo podemos -más o...